No podía ser otro que Bellingham
Una vez más, Bellingham apareció cuando el partido parecía visto para sentencia con el empate, y dejó claro que el Madrid y más con él, siempre tiene la última palabra. Esta vez le bastó con aprovechar un rechace de David Soria, monumental hasta ese momento. Remate con la izquierda y gol, triunfo del Real Madrid (2-1) sobre un Getafe ultra-defensivo, solo sustentando por la portentosa actuación de su guardameta,David Soria.
Fue un partido duro,bronco y muy exigente a la vez que emocionante. El Real Madrid tuvo que picar mucha piedra para ganar al Getafe, que con sus grandes dotes defensivos le complicó la existencia a los blancos. Y, más aún con el gol de Borja Mayoral a los 13 minutos en un fallo entre Fran García y Alaba, que el delantero azulón penalizó con el 0-1. Al Madrid le tocaba remar.
La tarde comenzó en el Bernabéu con la afición mirando por todos los lados al renovado estadio con su techo cerrado, el marcador led del primer anfiteatro, sus nuevos asientos, sin las lonas del fondo sur. Todos eran murmullos de admiración a un recinto que ya se parece bastante el proyecto inicial y que será inaugurado a finales de año. La verdad que impresiona el nuevo Coliseum blanco
La afición blanca acudió entusiasmada al renovado Bernabéu y deseosa de ver a su nuevo ídolo, Jude Bellingham, que debutaba en casa. A la postre no defraudó.
El Getafe, no obstante no se dejó impresionar con tantos estrenos,haciendo de su defensa una virtud. Tal vez sea el equipo que mejor defienda de la liga con ayudas y la solidaridad de todos, además de una gran capacidad de sacrificio. El caso, es que se encontró con un error de su rival para adelantarse en el marcador, explotándolo hasta el final con su carácter defensivo, pero sobre todo con la actuación estelar de su guardameta, David Soria que estuvo increíble, con paradas imposibles y casi milagrosas.
El Real, un tanto desquiciado durante toda la primera mitad, le costó encender el fuego que fue consiguiendo poco a poco. Su primer tiempo fue más que discreto. Le faltaba desborde por las bandas y velocidad en la circulación. A pesar de todo, dominaba a su rival al que encerró en su área. Fran García, en la posición de interior, filtró un buen pase a Joselu que remató duro al centro y Soria inició su recital con un paradón. También le paró a Modric un buen remate de cabeza.
El Madrid estaba fuera de foco, al que no solo contribuyó el juego de presión y asfixiante del Getafe, también el colegiado Melero López, que pitaba lo intrascendente y dejaba de sancionar lo importante. Señaló penalti a Bellingham que después tuvo que rectificar por mediación del VAR y para rematar,señaló el final del primer periodo en pleno ataque madridista.
Kroos, entró en escena tras el descanso. La entrada del alemán fue providencial, reventó el partido con jugadas y combinaciones de todos los colores. Empató muy pronto el Madrid por mediación de Joselu, en una jugada que tuvo de todo. Para celebrar el tanto de la igualada, tuvo que esperar hasta cuatro minutos. Se pedía fuera de juego previo penalti de Djené.
Todo lo que tuvo de discreto el primer periodo del Madrid,lo tuvo de brillante el segundo tiempo. Kroos siguió impartiendo cátedra . Un disparo suyo dio en la base del poste, y en el rechace busco el tiro cruzado que en otra gran intervención detuvo Soria. Carvajal, tras otro gran pase del alemán, mandó otro balón a la madera.
El Madrid estaba jugando de maravilla ante un Getafe que gozó de una buena oportunidad de Aleñá que detuvo Kepa en una buen intervención. Aunque la parada del partido hay que apuntársela a David Soria, al sacar una volea a bocajarro de Joselu. Fue la parada imposible ante un ariete clásico.
Llegaron los cambios en uno y otro equipo. Si antes habían entrado Kroos y Nacho, por Camavinga y Fran García por lo que Alaba pasó a jugar de lateral izquierdo también los hubo en el Getafe, que jugaba a lo Getate, con la entrada de Arambarri y Carmona y más tarde Iglesias por Borja Mayoral
Pasaban los minutos y el Madrid le puso una marcha más al partido. Llegó entonces, la jugada decisiva. Corría el minuto 95 (se había ampliado a nueve minutos el tiempo de descuento) En un saque de esquina el balón llega a Lucas Vázquez que había sustituido a Carvajal, hace un duro disparo que no puede atrapar Soria, Bellingham, atento a la maniobra y puntual a su cita,recogió el rechace y con la izquierda marcó el definitivo 2-1, el tanto del triunfo. El Bernabéu enloquecido grito “Jude, Jude”.
Sin duda alguna, con Bellingham ha nacido una estrella. Tiene clase,talento y gran capacidad de trabajo, pero sobre tiene esa virtud de estar en el sitio correcto en el momento justo. Lo volvió hacer.
El Real Madrid firma sus cuarto triunfo consecutivo y por lo tanto continúa de líder.
