Necesito que a mi mirada le den por otro sitio
Después de la Segunda Guerra Mundial el expresionismo abstracto acaparó toda la atención y descendió a lo que había más adentro de la angustia para extraerlo con fuertes y agresivos trazos o con susurrantes y reveladas extensiones cromáticas.
Pero a continuación llegaron otros con ganas de romper con lo anterior –algo tenían que hacer, se aburrían- y adujeron que tal tendencia artística imperante hasta el momento –estamos en los años sesenta del siglo XX- era gimoteante, sentimentaloide, histriónica, gesticulante y estaba ya agotada y vacía.
Ahora tocaba “lo que se ve es lo que se ve” –ingenioso el amigo Stella-, lo que algunos denostaron con el apelativo de “Idiot Art”, pues el espectador no estaba preparado todavía para ese predominio y preferencia por lo impersonal, lo gélido y lo aséptico.
Susan Sontag, en su alegato “Contra la interpretación”, postulaba un arte libre de significados y de interpretación. “Hablar hoy de contenido, escribía, es reaccionario, impertinente, cobarde, asfixiante”. Presten atención porque les estoy escuchando –yo, no ella- y temo lo que están pensando. Ni se les ocurra decirlo.
Y Ad Reinhardt añade lo de que “pintura es lo que queda cuando se quita todo lo demás –otro ingenioso-, es decir, ni líneas, ni manchas, ni fantasías, ni formas, ni composición, ni imágenes, ni visiones, ni impulsos, ni símbolos, ni signos, ni empastes, ni decoloraciones, ni coloraciones, ni figuras, ni placeres, ni dolores, ni accidentes, ni objetos, ni ideas, ni relaciones, ni atributos, ni cualidades: en suma, nada que no esté en la esencia”.
¡Vaya!, ¿por dónde anda esa señora y cómo se la reconoce? Aunque la busco, la rebusco, la vuelvo a buscar, pregunto por ella, escruto cada escondrijo, miro en cada esquina, husmeo en los estercoleros, indago, investigo, exploro y rastreo, nada de nada. Ni un mísero pelo, ni una mínima uña, ni una triste oreja. Pues vale, para eso estoy mejor ciego.
Gregorio Vigil-Escalera
De las Asociaciones Internacional y Española de Críticos de Arte (AICA/AECA)