Las guerras civiles y las guerras mundiales

Hoy recordamos la proclamación de la II República Española hace 90 años. Hoy deberíamos recordar la derrota de los Comuneros hace exactamente 500 años. Dos derrotas de una parte de España a manos de la otra parte.

Y muertos en cada caso dificiles de olvidar. Es impresionante cómo se olvidan los muertos en las guerras mundiales y cómo cuesta olvidar los de las guerras civiles.

Unos datos aproximados: en la II Guerra Mundial murieron unos 300.000 franceses y unos 5.000.000 de alemanes. Hablo del frente occidental.

Los alemanes y los franceses se entienden estupendamente, hacen homenajes prudentes a sus muertos y colaboran en todo por el progreso de ambos. Nada se olvida, pero el recuerdo de aquellos hechos no es para agredir al otro, sino para encontrar cada día nuevos puntos de encuentro.

Los españoles no olvidamos nuestros dolores producidos por una Guerra Civil. Habrá unos 700.000 muertos de un lado y de otro y de unos castigos y de otros. Aquí la cuestión es debatir (indirectamente, o no) quién tenía razón. Y se suman y se restan los muertos y algunos tratan de dejar enterrados en el anonimato a cierto tipo de muertas/os.

Y la Guerra Civil terminó. Y los ideales de ambas partes andan por ahí. Y se recuerda lo que está lejos del sufrimiento de Europa.

He asistido a grandes y pequeñas manifestaciones en estos tiempos por el recuerdo de la Batalla de Villalar. Los luchadores por las libertades de Castilla fueron ajusticiados por las gentes del rey Carlos V y los recuerdos perduran.

A los españoles nos cuesta infinito olvidar nuestras batallas entre nosotros, pero por ahí una guerra mundial se puede interiorizar con generosidad e inteligencia.

¿No podemos hacer un esfuerzo fraternal unos y otros? Pero requiere empezar por darse la mano unos viejos azules y otros morados. Parece casi imposible, es verdad, pero a nadie le he escuchado ni intentarlo.

Original en luissolana.com