Insultos entre “youtubers”
Debemos hablar de una nueva profesión, la de los “youtuber”, que están alcanzando una gran popularidad y relevancia; convirtiéndose en figuras públicas y conocidas en todos los ámbitos.
Ahora bien, qué es y cuál es su trabajo. Se considera “youtuber” a quienes comparten todo tipo contenido audiovisual en su canal dentro de la web de vídeos YouTube; siendo lo más común que sea contenido creado por ellos mismos; ya sea una creación íntegramente suya o apoyándose en contenidos creados por otros canales.
De este ámbito queremos destacar que entre sus contenidos más habituales están el hablar de su propia vida, contando sucesos que les han ocurrido u opinando sobre cualquier aspecto; lo cual es aprovechado por otros para opinar y comentar sobre ese video que ha sido previamente compartido o subido, generándose una retroalimentación entre ellos y una interacción.
Esta interacción o “feedback” no tiene por qué ser en términos positivos. Se puede dar una opinión negativa de un video que previamente ha sido subido. De esta forma se genera un conflicto, que produce más expectación entre su público, que se traduce en más visitas al canal y en consecuencia más ingresos.
Esto último es lo que ha sucedido entre dos de los “youtuber” más conocidos, “Wismichu” y “Dallas Review”. Este último denunció al primero porque subió un video donde le calificaba de “miserable”, “psicópata”, “muy mala persona”, “no es el ángelito que todos creéis”, “una hiena que aprovecha cualquier momento de debilidad para devorarte”, “desgraciado” y “cabrón”. Incluso afirmó que tenía varias denuncias por violencia de género, acoso y abuso sexual. Debemos recordar que todas está afirmaciones se producen en un video, subido a YouTube, y que tiene millones de visualizaciones.
Por estas declaraciones se acusó a “Wisminchu” de injurias, por los insultos, y por calumnias, por las acusaciones de delitos. Siendo resuelto por los Juzgados de lo Penal de Barcelona, entendiendo que en este caso en concreto no existía delito alguno.
Respecto a las calumnias referidas, ya que le atribuyó la comisión de algún delito, como violencia de género, acoso y abuso sexual; se estableció en la Sentencia que, si bien es cierto que no ha sido condenado por dichos delitos realmente, si existían en el momento denuncias presentadas por esos motivos frente a “Dallas Review”. Motivo por el cual se absuelve al otro “youtuber” del delito de calumnias.
En relación al delito de injurias, por los insultos indicados. Entiende la Sentencia que sí se han producido dichos insultos, pero que hay que valorarlos dentro del contexto en que fueron emitidos. Ambos implicados viven de su imagen pública, transmitiendo su vida íntima y personal, exponiéndose a que terceros puedan hablar de lo que ellos mismos exhiben. Ganando dinero con ello. Incluso en estos hechos en concreto denunciados, ambos han utilizado dicho conflicto para generar y subir vídeos sobre ese tema, hablando mutuamente de ellos, aumentando la disputa y obteniendo más visitas; que recordemos se traduce en más ingresos. De tal forma que ambos, incluido el denunciante, se ha visto beneficiado y ha aprovechado dicha situación.
Unido a ello, el propio denunciante, también ha creado vídeos en donde insulta y acusa al otro. Por lo que termina indicando la sentencia que la actuación del denunciado no tiene ánimo de injuriar, si no que se trata de críticas al primero y defenderse de sus comentarios.
Esta sentencia no indica que en YouTube se pueda insultar y acusar a otros libremente y sin ninguna repercusión. Únicamente establece que dada la relación preexistente entre ambos, en este caso en concreto, no puede apreciarse delito.