¿Cuándo la igualdad de mujer y hombre?
Es impresionante la cantidad de esfuerzos que están haciendo muchos países para acercar lo más posible los derechos de las mujeres a los de los hombres.
Yo me uno a cada uno de esos esfuerzos.
Pero sería bueno adentrarse en la raíz de los problemas y no sólo en la compensación económica o temporal. Que está bien y que dure, pero así nunca se conseguirá la igualdad del hombre y la mujer.
Pero no está muy lejos la solución final.
En los últimos meses del año 2019 (hace nada) el físico y biólogo Ball se hizo cortar un trocito de carne de un hombro y lo pasó a cultivar en un medio adecuado y bajo microscopio. Y, poco tiempo después, pudo ver ante su mirada que las células del hombro habían mutado en células como las de su cerebro.
Ahora ya andan los científicos con la reproducción in vitro bien ordenada. En estos momentos hay unos 6 millones de seres humanos concebidos técnicamente. Falta un paso más.
Hay un pacto entre investigadores para que los desarrollos sobre celulas humanas no pasen de los 14 días. Una cultura general frena a los investigadores a que vayan más allá. Los de religiones orientales parece que se atreven algo más y en Japón hay indicios de cruzar esa fecha. Ya veremos.
Pero lo importante es que todo apunta a que un día una mujer y un hombre dejarán su óvulo y su espermatozoide a un laboratorio y 9 meses después les entregarán a su hijo.
Ni nueve meses sin actividad ni meses de crianza: el laboratorio y Nestlé harán que la mujer en el trabajo sea absolutamente igual que el hombre.
Queda un tema sobre el que no he visto ni reclamaciones feministas ni ideas biomédicas: la menstruación; la regla. Hay que lograr que desaparezca esa etapa de la función maternal de la mujer. No es la más importante, pero es insistente y degradante.
Ando leyendo todo lo que puedo sobre conseguir que los niños nazcan sin un vientre materno, pero no he visto nada que ese castigo cíclico de la mujer se investigue cómo puede desaparecer