Con el empate (0-0) frente al Betis en el Alfredo Di Stéfano y antes, con el Getafe con el mismo resultado, al Madrid se le escapa la liga.
El partido entre Real Madrid y Betis fue un quiero pero no puedo. No fue un mal partido, pero tampoco bueno. Incluso se alcanzaron momentos de aburrimiento. Por faltar, al equipo de Zidane le faltó ambición, energía y gol. Y es que, cuando Benzema apenas aparece nada sucede en el Madrid, donde no hay nadie que le sustituya en la cita con el gol.
A Benzema , al igual que a sus compañeros diría que les está pasando factura el esfuerzo de los últimos partidos, que han tenido que afrontar con muchas bajas. Se ve a un equipo fatigado. Están viviendo al filo de lo imposible y da la sensación que con lo que tienen y con lo que ha pasado y está pasando, no les da para revalidar el título de liga. Ante esta circunstancia, me da que se van a centrar más en la Champions que en el título doméstico, y más aún, después del tropiezo ante el Betis. Pensar en la Champions es perder la liga, como de alguna forma le está pasando. Hasta cierto punto es lógico que el Madrid piense de esta manera, teniendo en cuenta las circunstancias de lo que ha padecido y lo que le viene.
En la liga, el Madrid no depende de sí mismo y en la Champions, si. Está a dos partidos. De ahí que toda la carne en el asador la ponga en la competición europea. Con esta idea, fue como planteó Zidane el partido contra el Betis que aunque terminó sacando toda la artillería, Hazard incluido, y poniendo cerco a la portería de Bravo; en cambio, no empezó a todo trapo sino más bien en tono reposado.
Seguramente , el martes ante el Chelsea será otra historia. La liga, por ahora se aleja, a la espera de lo que hagan Atlético, Barcelona y Sevilla. Con los ingleses esperándoles en la máxima competición europea, Zidane volvió al 4-3-3 con Nacho en el lateral izquierdo; la reaparición de Carvajal en el lateral derecho; la presencia de Isco en el centro del campo. Vinicius fue suplente, se lo guardó para el martes aunque salió poco después de comenzar el segundo periodo.
El Betis, hizo su partido con mejor posicionamiento táctico en los primeros minutos para después, en la segunda parte, jugar a la contra. Así fue como gozaron de dos inmejorables ocasiones para haberse adelantado en el marcador. No lo hicieron por errores propios de Guido, primero, y después de Borja Iglesias. En ningún momento desentonó el equipo de Pellegrini, que tuvo mucho toque y buen dominio del balón pero careció de profundidad.
El Madrid, tras los primeros minutos de dominio de los béticos, se estiró un poco aunque sin demasiada convicción. Benzema, como viene siendo habitual, fue la poca luz que se vio en una jugada que resolvió en un palmo del terreno para sacar un buen disparo que rechazó Bravo, el portero de confianza de Pellegrini. Fue lo único potable de un pelmazo primer tiempo.
La segunda parte, más de lo mismo. El Betis comenzó estirándose un poco más bajo la batuta de Lainez que casi nunca encontró respuesta en sus compañeros. El Madrid, siguió a la suyo eso sí, poniendo un poco más de nervio. Rodrygo en un centro chut mandó el balón al larguero. Fue lo último que hizo, porque inmediatamente después Zidane le sustituyó por Vinicius con la idea de ponerle algo de chispa al partido. Poco después dio entrada a Marcelo por Isco, y Odriozola por Carvajal, volviendo a jugar con tres centrales.
Con estos cambios, el partido y el Madrid tuvo más marcha. Vinicius en una contra tuvo una gran ocasión, pero de nuevo, como en otras tantas ocasiones, se le hizo de noche a la hora de finalizar. Ya nada cambió, incluso hubo motivo para pitar un penalti por mano de Miranda.
En el último tramo del partido ¡por fin! entró Hazard que poco pudo hacer, aunque sí hizo una buena jugada que no tuvo la respuesta adecuada en Vinicius.
Con este empate, el equipo blanco deja escapar 2 puntos antes de que, el domingo, jueguen Atlético, Barcelona y Sevilla. Este puede haber sido el principio del adiós a la liga del Real Madrid.