IDA asegura que los contagios en Madrid se están produciendo «entre otras cosas, por el modo de vida que tiene nuestra inmigración»

Fátima Caballero/Sofía Pérez Mendoza/eldiario.es La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, no ha abandonado su hoja de ruta para esta legislatura pese a la pandemia y la situación crítica en la que se encuentra de nuevo la región que lidera de otra vez el número de contagios en el país. En un discurso plagado de anuncios sin mucha más concreción, Ayuso ha apostado por seguir impulsando su perfil nacional cargando contra el Gobierno de Pedro Sánchez, ha anunciado una ley para blindar la educación concertada y ha insistido en que su Gobierno rebajará los impuestos como ya anunció que haría durante la campaña electoral de las autonómicas. La presidenta madrileña ha rescatado esa medida pese a que el Gobierno regional prevé una caída del PIB del 12,7% por la crisis económica provocada por el coronavirus: «Mantenemos intacto nuestro compromiso de seguir bajando los impuestos en la Comunidad de Madrid, tal y como hemos hecho en los últimos 16 años», anunciaba la presidenta madrileña en la primera jornada del Debate del Estado de la región que se reanudará este martes con las réplicas de los grupos parlamentarios.

Ayuso ha prometido la rebaja de medio punto en todos los tramos del IRPF, «la principal reducción de impuestos», ha dicho, una medida que centró su campaña a las elecciones autonómicas de mayo de 2019 pero que dejó en un cajón nada más llegar a la Puerta del Sol porque la caja regional estaba en números rojos y su Gobierno fue incapaz de sacar adelante los presupuestos de este año. La presidenta madrileña no ha dado más detalles acerca de cuándo pretende el Gobierno regional aprobar esta medida, que en mandatos anteriores se han llevado a cabo el año previo a unos comicios.

Ayuso hacía este anuncio mientras reconocía que las previsiones económicas para la región son bastante pesimistas. El Gobierno regional espera una caída de la economía madrileña que podría llegar al 12,7% del Producto Interior bruto (PIB), «lo que se cifra en casi 30.000 millones de euros», ha cuantificado la presidenta autonómica, además de los 1.055 millones que ha dejado de recaudar este ejercicio por la crisis. Pese a estas dramáticas previsiones, para Ayuso una nueva rebaja de impuestos «es el camino de la recuperación económica». «Porque los países más prósperos son los países más libres. Los que también su burocracia acompaña al ciudadano y le protege, pero no se convierte en su principal obstáculo», ha proclamado desde la tribuna. Menos impuestos conllevan más libertad, a su juicio.

VÍDEO | Ayuso: «Pagar impuestos tiene beneficios, pero seguiremos bajándolos en la Comunidad de Madrid»

Ayuso defendía desde la tribuna de la Asamblea de Madrid que su Gobierno ha gestionado «la peor crisis sanitaria de las últimas décadas» con recursos propios y ha estimado el impacto para 2020 de 3.444 millones de euros: 2.389 millones de euros en un mayor gasto y de 1.055 en unos menores ingresos. Precisamente el Gobierno regional recibirá del Gobierno central una partida de 3.400 millones para hacer frente a la crisis.

Sobre anuncios para acabar con la burocracia ha habido uno más: la presidenta regional también se ha lanzado en su batalla contra la “hiperregulación”. Isabel Díaz Ayuso ha anunciado una nueva ley de “mercado abierto” para que “todo producto, empresa o autónomo establecido legalmente en España no necesite solicitar ningún permiso o licencia de actividad” para operar en Madrid. La regidora considera que “la libertad económica” ha impulsado “muchos avances” en la región. “La Ley del Mercado Abierto potenciará aún más la llegada de inversiones y empresas mediante la eliminación de trabas y regulaciones innecesarias”. El objetivo, ha continuado, es “la libre circulación de bienes y servicios mediante el reconocimiento automático de licencias”. “Bastará con que tengan todos los papeles en regla en sus respectivas autonomías de origen”, ha precisado.

La educación concertada, bandera histórica del PP, ha sido otra de las protagonista en los anuncios de la presidenta madrileña durante el debate del Estado de la Región. Ayuso ha prometido una ley para “blindar” la educación concertada porque, a su juicio, la “libertad está hoy seriamente amenazada por distintas fuerzas políticas”. El anuncio produce a diez días de la convocatoria de huelga del profesorado de la escuela pública por la falta de profesorado y espacios para abordar la nueva situación impuesta por la COVID-19. Ayuso pretende elaborar ahora una normativa autonómica que no existe en ninguna otra comunidad para “garantizar las plazas atendiendo a la demanda de las familias”. En la práctica, esto es algo que ya hacía el Gobierno regional desde la época de Esperanza Aguirre.

Al igual que ha hecho el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, desde el Ayuntamiento de la capital, la presidenta regional ha recuperado el discurso contra la ocupación que protagonizó el PP durante las pasadas municipales y autonómicas. La presidenta de la Comunidad de Madrid retoma una de las banderas de su campaña electoral, abandonada durante la epidemia, con el anuncio de un nuevo teléfono ‘112 Ocupación’ y una oficina de asesoramiento a los ciudadanos gestionada por la Agencia de Seguridad y Emergencias de la región. “Informará sobre qué hacer y para que se traslade inmediatamente cada caso a la Fiscalía o a la Delegación del Gobierno”, ha explicado antes de arrancar un aplauso de su bancada. Ayuso ha llegado a comparar estas medidas contra la ocupación con las de violencia machista avanzando que la Comunidad de Madrid se personará como acusación en estos procesos, “como hace en los de violencia de género”.

Plan para la Atención primaria: 80 años en 3 años

El anuncio más esperado este lunes era el del plan para la Atención primaria que ha sido también el más vacío de contenido. La presidenta de la Comunidad de Madrid intentaba a marchas forzadas evitar la huelga en los centros de salud convocada por los sanitarios para el próximo 28 de septiembre anunciando una inversión de 80 millones de euros a tres años que supondrá «un Plan de Acción sin precedentes para la Atención Primaria madrileña».

«Somos conscientes de la situación que atraviesa este ámbito asistencial, del esfuerzo de sus profesionales y de las condiciones de su trabajo, que año a año han ido deteriorándose. Y queremos darles soluciones. Les necesitamos y les reconocemos. La Atención Primaria necesita un cambio profundo en todo el Sistema Nacional de Salud. Y la Comunidad de Madrid quiere liderar esta transformación. Nada similar se ha realizado en la última década», ha dicho la presidenta madrileña sobre su plan.

Este Plan de Acción implica una inversión de más de 80 millones en materia de recursos humanos a tres años. Esta inversión se aplicará desde el último trimestre de este año y conllevará modificaciones organizativas y retributivas para nuestros profesionales. Ayuso también ha señalado que este plan mejorará las condiciones laborales de los profesionales para reconocer todo el esfuerzo que realizan y también, para hacer más atractiva la Atención Primaria y conseguir nuevos profesionales que se incorporen a ella». La presidenta promete aumentar de manera progresiva la plantilla, «con el fin de disminuir la presión asistencial, dedicarle más tiempo a cada paciente y favorecer la estabilidad laboral».

Defensa a la corona y ataques al Gobierno central

Además de anuncios, el discurso de la presidenta madrileña ha estado plagado de referencias a la política nacional y de ataques contra el Gobierno central de PSOE y Unidas Podemos-IU. Ayuso ha hecho una defensa cerrada de la Corona y ha criticado que no se haya “cesado fulminantemente” al vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, por las “tentativas para desprestigiar al jefe del Estado”. “Ha atacado con todas su fuerzas a nuestro sistema democrático y sus contrapoderes sin que haya sido cesado fulminantemente”, ha dicho la presidenta madrileña durante el pleno en el que debe hacer balance del estado de la región.

VÍDEO | Ayuso critica que no se haya “cesado fulminantemente” a Iglesias por “desprestigiar al jefe del Estado”

“Frente a esto, quienes nos hemos entendido para dar luz verde al actual gobierno de la Comunidad de Madrid, ratificamos nuestra lealtad a su majestad el rey, subrayamos nuestro compromiso con la unidad de España y proclamamos nuestra creencia en el diálogo, el respeto y la tolerancia, recogidos en la Constitución de 1978”, ha apuntado Ayuso, que considera que el Rey “es de todos”.

Isabel Díaz Ayuso ha insistido durante el Debate del Estado de la Región en que Madrid está siendo objeto de una “campaña de desprestigio” por parte del Gobierno de Pedro Sánchez y ha acusado al Ejecutivo de lastrar la economía madrileña con las decisiones tomadas durante el Estado de Alarma con un “comité de expertos inexistentes”.

En este punto, la presidenta ha agradecido a Ciudadanos “que se mantenga al margen del deshonor que pretende el PSOE” ante los tambores de moción de censura y de adelanto electoral que se desataron tras las declaraciones del secretario general de los socialistas madrileños, José Manuel Franco, cuando abrió la puerta a entregar la presidencia a Ignacio Aguado a cambio de echar de la Puerta del Sol a Ayuso.

Sobre este punto, la presidenta madrileña también tenía un mensaje para su otro socio de Gobierno, Vox. La presidenta madrileña ponía fin a las informaciones que hablan de una crisis de gobierno para contentar al partido de extrema derecha a cambio de su apoyo a los presupuestos de 2021 como ha pedido en reiteradas ocasiones su portavoz Rocío Monasterio. Ayuso ha defendido que en su Ejecutivo «no sobra nadie»: «Somos un gobierno fortalecido por el sentido de la responsabilidad y por la conciencia del deber. No hemos perdido un minuto en otras cuestiones.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, abordaba su primer balance de legislatura con “la convicción del deber cumplido”, ha dicho Ayuso al inicio de su discurso. La regidora, tras una errática actuación durante el coronavirus, considera que su gestión ha sido “positiva” en el último año” y ha defendido el trabajo “de cada uno” de sus consejeros, tras las explícitas tensiones dentro del Gobierno de coalición.